Llamar a puerta fría da respeto

Llamar a puerta fría da respeto. Frente a un prospecto que no conocemos, o una centralinista que hace obstrucción, perdemos a menudo la seguridad. Y transmitimos una pésima impresión que no motiva a seguir adelante

¿Qué hacer?

Cuando era pequeño me hacían aprender de memoria los poemas

Lo odiaba

No había manera. La palabra "tal" siempre se transformaba en la palabra "cual", que a mi entender significaba lo mismo, pero que en el poema no estaba

Total, que por cuántos esfuerzos le dedicase, nunca salía perfecto

Pero pasaban dos cosas:

- lo que acordaba era suficientemente bueno para parecer correcto, natural y espontáneo
- mi confianza iba creciendo con la práctica

Prospectar por teléfono a puerta fría se parece a aprender un poema. Lo que pasa es que el poema tendrás que escribírtelo tú mismo

Escribe un guión de lo que piensas decir a una centralinista y a un prospecto, apréndetelo y ensáyalo como si fuese un poema

Entonces pasarán dos cosas:

- cuando estés hablando, serás lo suficientemente espontáneo para parecer natural
- tu confianza irá creciendo con la práctica

Y en muy poco tiempo, ya no necesitarás más el guión y perderás el miedo...